martes, 12 de enero de 2010

Eso es crecer...

Ayer tuve uno de los días más tristes de mi vida (hasta ahora). Mi novio me cortó...

Sé que puede sonar muy dramático de mi parte, pero en verdad estoy triste, no era una relación más, era en verdad algo especial.

Quien me conoce sabe que el tema de las "relaciones personales" en mi vida siempre son complicadas. Busco en la persona incorrecta y de alguna manera siempre hago que las cosas terminen, tal vez por tonta o por cobardía, pero generalmente soy yo quien provoca la ruptura.

Hace unos meses lo conocí. De la forma más rara, en una feria!!!. Es mi vecino y por irónico que parezca, nunca lo había visto, hasta ese día.

Simpático, alegre y con muy buen sentido del humor. Desde el primer día me hizo reír.

¿Cómo empezó?, pues bien a bien no lo sé.

Solíamos vernos por las tardes. Siempre que yo volvía del trabajo, lo encontraba en la calle y nos poníamos a platicar. Así podíamos pasar horas todos los días, platicando de todo y de nada, cosas del trabajo, el clima jaja y hasta chistes, para poder soltar una fuerte carcajada y terminar bien la noche.

Empezó a formar parte de mi vida y yo de la suya. Hubo un click, sin más ni menos. ¿Creen en el amor a primera vista?

Él estaba en una relación un poco complicada. Yo, por otro lado, estaba "intentando" formar una relación que no me llenaba del todo, pero era buena persona.

Una noche con estrellas (y eso que es raro ver estrellas en esta ciudad) marcó la diferencia. Algo en el cosmos nos hizo tomarnos de la mano y como si los dos lo estuviéramos pidiendo a gritos, nuestros labios se juntaron y nos robamos un beso. Ese beso que se convirtió en nuestro mejor cómplice.

Viví una de las mejores relaciones en mi vida, era mi complemento en todos los sentidos, me hacía feliz, me hacía sentir plena, me divertía, me hacía reír.

¿Qué nos pasó? esa es la pregunta que ahora ronda por mi cabeza. De la noche a la mañana todo cambió. Se alejó.

Ayer hablé con mi mejor amiga, me sirvió mucho platicar, necesitaba hablar, llorar... Hay algo que me dijo y que es cierto. Ésta vez no fui yo quien lo terminó.

Las razones están de más, solo que no entiendo porqué te tienes que alejar de una persona que te quiere y a la que quieres.

Al parecer nuevamente el tiempo no era el correcto, quisimos jugarle una treta al destino y nos tocó perder.

Charbe me dijo que yo había madurado, esta relación me había echo mucho bien, porque me hacía feliz.

Pero hoy ya no está y no puedo sumergirme en esta tristeza, tengo que seguir adelante y no retroceder los muchos escalones que ya había avanzado.

Así son las relaciones, a veces estás bien, otras no tanto. Te enamoras y te rompen el corazón. Y así va ser siempre, te vas a tropezar mil veces, hay que aprender a ver los tropiezos con inteligencia.

Hoy siento tristeza porque pierdo ese pedacito que me hacía feliz, pero como bien dijo mi amiga, eso es crecer...

Regresando

Es increíble lo rápido que pasa el tiempo. Han pasado casi 2 años desde que cree este blog, y hoy lo retomo por casualidad, porque recordé que alguna vez había creado un blog.

Regreso con ganas de escribir. Hablar para mi nunca ha sido facil, mis amigas dicen que siempre me guardo las cosas.

Así que estoy aquí, buscando un medio para hablar lo que nunca digo...